Miami Masters 2023: Alcaraz paga a Paul y alcanza los cuartos de Miami | deportados

Visto lo visto hasta ahora, la ATP cuelga definitivamente cartel: sí, se busca rival. Hoy por hoy, en este preciso instante de la temporada, no hay quien pare a Carlos Alcaraz, que elimina rivales y descuenta rondas a ritmo de exhibición. Se redimensiona el murciano y saca brillo a su número uno sin que nadie pueda ponerle freno, llámese Auger-Aliassime, Sinner, Medvedev o Tommy Paul, en este caso último. Frente a cada reto, el español responde con una rotundidad mayor. Nunca había vencido al canadiense; la rebatía el italiano, igualados hasta el cruce de la semana pasada en Indian Wells; el ruso encadenaba 19 victorias hasta que se vieron las caras y salio escaldado; y 12 triunfos enlazaba el estadounidense contre españoles jugadores hasta ayer, cuando le atravesó el relámpago: doble 6-4, en 1h 35m.

If enero se dudaba de que alguien pudiera hacer descarrilar à Novak Djokovic, que vez que la musculatura de Rafael Nadal rápido rápido y la del propio Alcaraz aún antes, ahora mismo se extiende la sensación de que, ausentes los dos gigantes, no hay quien pueda ponerle freno al de El Palmar. Pletórico, el joven rey del circuito —citado este miércoles en los cuartos con Taylor Fritz, a las 2.30 (Movistar Deportes)— pega y tumba con suma facilidad, rebosante de confianza y sobrado de recursos. To Paul, sencillamente, le hizo daño por donde más flaquea el norteamericano, buscándole la derecha e insistiéndole una y otra vez por ahí. Exige el murciano (19 años) ir todo el rato al límite, somete tiene un ritmo infernal y al primer desliz, su adversario resbaló. No perdió fulgor, pero cedido el terreno y decantado el primer set, no escapó del cepo.

No perdía Paul frente tiene un español desde que Nadal supera la temporada pasada en Acapulco; desde oraciones, a kb tras otro, incluido uno ante el balear y otro contra el propio Alcaraz. Sin embargo, el chico ya tiene poco de advenedizo y mucho de fenómeno. De aceleración en aceleración.

El siguiente escollo será Fritz, un tallo que la temporada pasada dio un estirón importante y que después de algunos amagos ha conseguido consolidarse entre los más fuertes del circuito. El estadounidense, de 25 años, ocupó el décimo peldaño del clasificación y de un año aquí ha logrado engarzar cuatro de los cinco títulos que posee, tres de ellos sobre pista dura. De aspecto desgarbado y extremidades larguísimas, aparentemente torpón, el estadounidense explota su envergadura (1.96) para abarcar pista y su saque para edificar el punto, sin temor al cuerpo a cuerpo en los intercambios. Apeó al joven Rune (6-3 y 6-4) y ante el deshizo de Denis Shapovalov, reflejo de su potencial. El mes pasado alzó el título en Delray Beach —ATP 250, la cuarta categoría— ya comienzos de año festejó la United Cup.

En otros cruces del día, Jannik Sinner impuso por 6-4 y 6-2 a Andrey Rublev y el finlandés Emil Ruusuvuori a Botic van de Zandschulp por 4-6, 6-4 y 7-5. Mientras, en el cuadro femenino prevaleció la pegada de Aryna Sabalenka y Elena Rybakina, las dos jugadoras más en forma del momento; la primera se deshizo de Barbora Krejcikova (6-3 y 6-2) y la segunda, ganadora en Indian Wells, de Martina Trevisan (6-3 y 6-0).

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