Muere otro alto cargo de Defensa rusa en extrañas circunstancias

Cuando el patrón se repite, las casualidades dejan de serlo. Ayer, otra alta funcionaria del Ministerio de Defensa ruso fue hallada muerta en extrañas circunstancias. Marina Yankina, de 58 años saltó por la ventana de un 16 piso en el que vivía en San Petersburgo.

Según el portal web ruso Mash, el cadáver fue descubierto a las puertas del edificio en la calle Zamshina.

La misma página rusa informó que unos minutos antes de supuestamente quitarse la vida, Yankina llamó a su exposo y le contó lo que estaba a punto de hacer.

Yankina ejercía como directora financiera del Distrito Militar Occidental de Rusia. Anteriormente había trabajado en el Servicio Fiscal Federal y fue también vicepresidente del Comité de Relaciones Inmobiliarias de San Petersburgo.

El Comité de Investigación ruso confirmó ayer la muerte de Yankina y anunció el inicio de una investigación.

Esta muerte en circunstancias extrañas se suma a otras 29 entre empresarios y funcionarios rusos que desde el inicio de la guerra en Ucrania, el pasado 24 de febrero, han desaparecido. Algunos han caído desde las ventanas; otros corrieron abajo o sufrieron enfermedades fatales. Hace unos días, murió el general de división del Ministerio del Interior ruso Vladímir Makarovde 72 años, de un aparente suicidio en un suburbio de Moscú, semanas después de haber sido destituido por Vladímir Putin.

En circunstancias similares a las de Yankina, murió Ravil Maganovejecutivo petrolero que salió disparado por la ventana del hospital donde estaba ingresado.

Maganov, presidente de Lukoil, había mostrado su rechazo a la invasión rusa en Ucrania, “Defendemos el cese inmediato del conflicto armado”, había dicho en un comunicado la petrolera rusa.